El director de cine y político argentino Fernando ‘Pino’ Solanas falleció este viernes a los 84 años en París, ciudad donde trabajaba como embajador de Argentina ante la UNESCO y donde había sido hospitalizado por coronavirus, según informó la Cancillería argentina en un comunicado: “Murió en cumplimiento de sus funciones como embajador de Argentina ante la UNESCO. Será recordado por su arte, por su compromiso político y por su ética siempre al servicio de un país mejor. Un abrazo a su familia y amigos ”.
Solana fue líder del partido de izquierda Proyecto Sur (que forma parte del Frente de Todos, la formación de al que pertenece Alberto Fernández, presidente de Argentina).
El 16 de octubre, el célebre cineasta había informado en su cuenta de Twitter que tanto él como su esposa, Ángela Correa, habían dado positivo por covid-19 en la capital francesa, por lo que fueron hospitalizados. Cinco días después, el propio Solanas reveló que se encontraba en cuidados intensivos y que su estado era “delicado”.
Nacido el 16 de febrero de 1936, en la localidad bonaerense de Olivos, Solanas estudió derecho, música y teatro y rodó su primer cortometraje de ficción, Seguir andando, en 1962.
Durante el régimen militar de Juan Carlos Onganía, él filmó clandestinamente con Octavio Getino, en 1969, su primer largometraje documental, La hora de los hornos, sobre el neocolonialismo y la violencia en América Latina, una de sus obras más importantes.
En ese momento, como militante del peronismo de izquierda, fundó el grupo Cine Liberación con Getino, y en 1975 realizó su primera película de ficción, Los hijos de Fierro. Ese mismo año, fue amenazado por el grupo ultraderechista Triple A y, en 1976, tras el inicio de la dictadura argentina, un comando militar intentó secuestrarlo. Por esta razón, Solanas se exilió a España y luego a Francia, donde escribió el documental Le regard des autres .
Durante el tiempo que pasó fuera de su país, él se solidarizó, junto a otros exiliados, con las Madres de Plaza de Mayo, denunciando internacionalmente los crímenes de la dictadura. Con el regreso de la democracia, en 1983 , Solanas regresó a Argentina y dos años después rodó El exilio de Gardel: Tangos, mientras que en 1988 filmó Sur, por lo que recibió el premio a la mejor dirección en el festival de Cannes.
A lo largo de su amplia trayectoria cinematográfica, que le valió numerosos premios nacionales e internacionales, también cabe recordar su documental Memoria del Saqueo, que recorre la historia argentina desde el último régimen de facto hasta el estallido de la crisis de 2001-2002.
Cineasta y político
A principios de la década de 1990, su voz era una de las más críticas a las políticas del presidente argentino Carlos Menem (1989-1999) y denunció haber sido víctima de un atentado (varios disparos de armas de fuego) por parte de grupos presuntamente vinculados a la seguridad del Estado.
Su paso por la política lo llevó a ser diputado y senador en varias ocasiones y en 2007 fue candidato a la presidencia, terminando quinto con el 1,6% de los votos.
En las elecciones de hace un año, Solanas, que es padre de dos hijos (Juan Diego, también cineasta, y Victoria, escenógrafo), ganó un escaño en la Cámara de Diputados, pero renunció poco después cuando el presidente Alberto Fernández le ofreció a ser embajador argentino en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).