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Los videojuegos no siempre han tenido la mejor reputación, pero esto está demostrando constantemente que es lo contrario. Si bien muchos pueden considerar los juegos como una forma de entretenimiento sin sentido, una nueva investigación ha encontrado que puede proporcionar numerosos beneficios, desde la socialización hasta el desarrollo cognitivo.
Esto es aún más importante dado que la Generación Z ha crecido con la tecnología jugando un papel importante en su educación. Si los juegos fueron parte de esa infancia, estos son solo algunos de los beneficios que pueden haber obtenido de ellos:
Promueve la amistad
Puede imaginarse que los juegos son una actividad en solitario, pero en realidad puede ser muy sociable. Hay muchos juegos multijugador que implican jugar con o contra otros, ya sea en la vida real o virtualmente. De hecho, los videojuegos crean un terreno común para que los niños hagan amigos, al tiempo que les brindan un lugar para pasar el rato. Animal Crossing, por ejemplo, permite a los jugadores visitar las islas virtuales de sus amigos y jugar juntos.
En un momento como este, el acceso al mundo virtual podría ser especialmente valioso para los niños que no han podido pasar tanto tiempo con sus amigos como les gustaría. A través de los juegos, pueden mantenerse en contacto con sus amigos, combatiendo la soledad y manteniendo relaciones.
La Dra. Rachel Kowert, directora de investigación de Take This, una organización sin fines de lucro de salud mental, dice;
“Los juegos son una excelente manera de conectarse socialmente con los demás (especialmente en momentos de distanciamiento social). Se ha descubierto que las experiencias compartidas, como jugar juntos, refuerzan las conexiones sociales positivas y están vinculadas a una mayor autoestima y un sentido de pertenencia, así como a una disminución de los sentimientos de depresión, ansiedad y aislamiento”.
Enseña habilidades cognitivas
Muchos juegos tienen elementos de estrategia, resolución de problemas, liderazgo y toma de decisiones integrados en ellos. Esto puede enseñar a los niños una variedad de habilidades para la vida diferentes y ayudar con su desarrollo cognitivo.
Por ejemplo, Minecraft requiere que los jugadores exploren tierras virtuales, recolecten recursos y creen herramientas para construir sus propios mundos virtuales. Esto implica planificación y pensamiento estratégico, al mismo tiempo que hace fluir su creatividad. También hay una edición educativa que está diseñada específicamente para enseñar a los niños los conocimientos esenciales y se puede utilizar en el aula.
El Dr. Matthew Barr, profesor de Estudios de Juegos en la Universidad de Glasgow, explica;
“No es casualidad que los videojuegos ejerzan ciertas habilidades transferibles. Muchos desarrolladores de juegos describen cómo diseñan sus juegos para requerir comunicación, por ejemplo, o pensar críticamente para tener éxito. Los diferentes géneros ejercitarán diferentes habilidades”.
Puede generar oportunidades profesionales
Los juegos no solo enseñan habilidades cognitivas, sino que también brindan a los niños una valiosa experiencia en el uso de la tecnología. En el mundo digital en el que vivimos hoy, esta experiencia puede transferirse a todo tipo de industrias. Más específicamente, podría abrir puertas a la industria de los juegos, o roles técnicos como los de codificación, programación o desarrollo de software.
Noel McDermott, psicoterapeuta especializado en salud, atención social y educación, dice:
“Los juegos son entornos complejos que requieren la retención de conocimientos y el desarrollo de estrategias para ganar. Hay oportunidades para aprender habilidades económicas y habilidades potenciales relacionadas con el trabajo en el campo de los juegos competitivos y el diseño de juegos “.
Por supuesto, para aprovechar realmente los beneficios de los juegos, es importante que los niños jueguen de manera responsable. Si bien los juegos pueden ser una fuente fantástica de entretenimiento y educación, ¡la moderación es clave! Poner un límite a la cantidad de tiempo que pasan jugando es una buena forma de animar a los niños a participar en otros pasatiempos.
También es importante controlar el tipo de juegos que están jugando para asegurarse de que sean adecuados para su grupo de edad. Pero teniendo en cuenta estas cosas, no hay razón por la que los juegos no puedan desempeñar un papel positivo en la vida de los niños.
