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El patchwork es una práctica que puede resultarte de lo más interesante, ya que puedes reutilizar telas y dar vida al dicho de “lo viejo siempre regresa a la moda”. Si estás considerando en darle a tu closet un toque extra de personalidad, el patchwork puede ser tu solución, además de un nuevo pasatiempo. ¡Vamos allá!
Hoy, en compañía de Philiosingracia y Espacio Magenta, vamos a hablar del patchwork, que es una técnica de costura que consiste en coser piezas de tela en un diseño más grande. El diseño más grande generalmente se basa en patrones repetitivos construidos con diferentes formas de tela (que pueden ser de diferentes colores). Estas formas se miden y cortan cuidadosamente, en formas geométricas básicas que las hacen fáciles de unir.
El patchwork se usa con mayor frecuencia para hacer edredones, pero también se puede usar para hacer tapetes, bolsos, tapices, chaquetas cálidas, fundas de cojines, faldas, chalecos y otros prendas de ropa. Algunos artistas textiles trabajan con patchwork, a menudo combinándolo con bordado y otras formas de costura.
Esta técnica de costura y armado textil existe desde tiempos antiquísimos y fue una parte de la historia textil de muchas culturas. Es que, el patchwork, sin ir más lejos, es un método de ensamble textil que consiste en la unión de recortes o retazos que convergen en un diseño mayor. Cada parte hace a un todo. Y hay algo de cada una de esas partes que trae consigo una historia, que luego se une a otra, en forma de relato. Es allí es donde radica la belleza de esta técnica.
En sus orígenes, el patchwork fue utilizado como un método para economizar recursos. En épocas donde los textiles no estaban al alcance de la mano (como lo están ahora), esta era la mejor opción para prolongar la vida útil de un textil lo más posible. Llegó al mainstream de la moda a fines de los años 60, de la mano del apogeo de la cultura hippie, dejando de ser simplemente una técnica para convertirse en un look. Así se instaló como una moda, manteniendo su esencia, la de reutilizar viejas prendas o textiles para crear una nueva. En los 90 hubo una reaparición de esta técnica, que es la que hoy rememora la generación Z.
Técnicas de patchwork.
Existen diversas técnicas de patchwork, estas son las principales:
- Quilting. Es la técnica del patchwork para elaborar la parte superior de colchas mediante la unión de retales. Un quilt es una colcha formada por tres partes, una superior decorada, un relleno y una parte posterior.
- Apliqué. Sobre una tela que sirve de base se cosen retales para crear figuras.
- Piecing. Es la elaboración de cuadros cosiendo retales sobre una base de papel.
- Patchwork japonés. Es una modalidad de patchwork en el que se utilizan retales pequeños y muchos detalles.
- PSA (patchwork sin agujas). Se diseñan figuras decorativas utilizando como base porexpan sobre el que se hacen hendiduras en las que se montan trozos de telas. Es una técnica muy utilizada para decoración navideña.
Lo que necesitas para realizarlo.
Cuando tenemos por casa diferentes retales de tela o prendas de vestir que queremos dejar de usar
Para aplicar el patchwork es necesario dedicarle paciencia, pues los resultados se verán sobre todo a largo plazo. Este es, quizá, donde reside gran parte del encanto. Muchos adictos al patchwork llegan a acumular durante años los diferentes retales de tela. Pero si quieres acortar este proceso te recomendamos aprovechar los cambios de armario para decidir qué prendas de ropa quieres dejar de usar. Si ves que no pueden tener una segunda vida como ropa, entonces destínala al patchwork y ve preparando el diseño de tu nuevo tejido. También te podrán servir viejas alfombras, colchas que tengan alguna parte descolorida, bolsos de tela…
Como materiales necesitarás un cúter especial para evitar deshilachar las telas, reglas para medir los patrones, hilos, cintas métrica, un lápiz con el que dibujar los patrones sobre un papel, un jaboncillo para marcar las telas y lo que utilizas para coser normalmente (dedal, tijeras y alfileres).
¿Qué telas utilizar?
Siempre son tejidos planos, es decir, que tienen elasticidad y son destinados para textiles del hogar o para la indumentaria.
Cualquier retal que tengas por casa podría serte útil. Sin embargo, cuanto más manejable sea la tela y más fácil sea para coser mucho mejor. Si es la primera vez que vas a emplear esta técnica de costura, tal vez te interese más una tela de algodón.
Otras telas que puedes utilizar son el lino, la franela, la loneta, la tela de los vaqueros o telas tramadas.
Además, es importante contar con una base de corte para apoyar en ella las telas que quieras utilizar. Así todo te resultará más fácil.
El patchwork es la tendencia que acompaña el camino de la moda sostenible. Esta técnica milenaria de reutilización textil cobra vida de la mano de la generación Z (y la pandemia), esta vez desde la consciencia ambiental.
Sin dudas, el 2020 fue un año para repensar la moda. Dentro de las enseñanzas que nos dejó la pandemia, especialmente en relación con la sustentabilidad, está el poder reconocer lo esencial, de revisar lo que ya tenemos y producir a partir de ello sin generar residuos en el camino.
Para muchas de las grandes firmas de moda, el confinamiento y el cierre de fronteras les marcó el camino de producir sus siguientes colecciones con lo que ya tenían, a revisar las telas de dead-stock (o stock en desuso) y reinventar sus colecciones con lo que ya tenían. Así fue como, en las colecciones de otoño-invierno 2021, firmas como Marine Serre o Chloe, bajo la nueva dirección de Gabriela Hearst, implementaron el patchwork en prendas creadas a partir de telas de stock de sus firmas, para darles una segunda vida y reducir sus desperdicios.
De igual manera, el patchwork como tendencia también fue furor en TikTok, adoptado por la generación Z, quienes lo implementaron bajo la estética de fines de los 90 a través del método DIY (do it yourself). Ya con una consciencia ambiental más elevada, los jóvenes de esta generación tienen más en claro las ideas del consumo responsable, por eso el patchwork como forma de reciclaje textil (accesible) se volvió tan viral.
El patchwork es una alternativa de moda sustentable.
Es interesante hoy en día poder trascender esta tendencia y volver a tomar esta técnica, por lo que es, como una oportunidad de reducir los desperdicios y de reutilizar textiles que ya están producidos, sean rollos de dead-stock de telas o prendas vintage que fueron descartadas. Así como hoy en día se están poniendo en valor métodos que nuestras abuelas o madres tenían incorporadas, el patchwork nos propone alargar la vida útil de un textil, darle otra chance a un producto que ya existe. De esta forma podremos reducir el impacto que la producción y los desperdicios de la industria de la moda tienen sobre el planeta.